Tecnología financiera es una herramienta para la lucha contra la pobreza

La experiencia internacional muestra que la tecnología financiera (FinTech) es un medio para mejorar la vida de las personas. Tal es así que uno de los casos más renombrados se verificó en Kenia (África), donde unas 194.000 familias lograron salir de la pobreza gracias al uso de plataformas de pago móvil, en especial la plataforma conocida como M-PESA. Los estudios demuestran que esta revolución financiera tuvo un impacto mayor en aquellos hogares donde las mujeres se constituían en las cabezas de familia.

Teniendo en cuenta la transformación generada por esta disrupción tecnológica, la Dirección de Inclusión Financiera del Ministerio de Hacienda y la alta gerencia de Bancard han programado reuniones de trabajo para evaluar el uso de la tecnología y la manera en que estas pueden ayudar al desarrollo de proyectos rurales con impacto en la inclusión financiera.

El uso de plataformas QR, la interoperabilidad de los sistemas, la instalación de políticas KYC (conoce a tú cliente), y la puesta en marcha de marcos regulatorios que combinen sistema de control con niveles óptimos de inclusión financiera, son los temas que compondrán la agenda de trabajo con diferentes sectores que participan en la construcción de un sistema económico con mayor inclusión financiera.

En Paraguay existen experiencias positivas en relación al uso de las plataformas electrónicas de pago, como ser el caso del Proyecto Última Milla. Este proyecto fue desarrollado por la Empresa Tigo (Tigo Money), en alianza con bancos privados (Familiar y Visión), y contó con el apoyo financiero del Fondo Multilateral de Inversiones (FOMIN) del Grupo Banco Interamericano de Desarrollo (BID).

Gracias al Proyecto Última Milla, unas 475.000 personas fueron beneficiadas con acceso a una gama de productos y servicios financieros.

La Inclusión Financiera es una política gobernada por el Comité Nacional de Inclusión Financiera, donde participan en un cuerpo colegiado las máximas autoridades del Ministerio de Hacienda, del Banco Central del Paraguay (BCP), de la Secretaría Técnica de Planificación (STP) y del Instituto Nacional del Cooperativismo (Incoop).

El objetivo de la política de Inclusión Financiera es que la población vulnerable pueda mejorar sus condiciones de vida a través de acceso al sistema financiero y sus productos, de una manera asequible (tasa de interés razonable).

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